La ONU declara 2025 como el Año Internacional de la Conservación de los Glaciares
Los glaciares representan mucho más que espectaculares paisajes blancos. Son fuentes vitales de agua dulce, reguladores climáticos naturales y testigos de la historia geológica del planeta. Sin embargo, el aumento global de las temperaturas ha desencadenado una pérdida acelerada de estas masas de hielo, con consecuencias devastadoras.
Frente a esta emergencia, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha proclamado 2025 como el Año Internacional de la Conservación de los Glaciares, con el objetivo de sensibilizar al mundo, promover investigaciones, incentivar políticas públicas y movilizar recursos para su protección.
¿Qué significa esta proclamación?
El Año Internacional de la Conservación de los Glaciares, aprobado por unanimidad en la Asamblea General de la ONU en diciembre de 2022 (resolución A/RES/77/158), responde a la creciente preocupación global por la acelerada desaparición de glaciares, particularmente en Asia Central, América del Sur, los Alpes y regiones polares.
Esta iniciativa es impulsada principalmente por Tayikistán, un país donde los glaciares alimentan a grandes ríos como el Amu Darya y que ha sido particularmente afectado por el retroceso glaciar. La resolución destaca la urgente necesidad de:
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Incrementar la cooperación científica internacional
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Financiar sistemas de monitoreo y alerta temprana
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Fomentar políticas públicas para la adaptación al cambio climático
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Impulsar la educación ambiental a nivel global
¿Por qué son importantes los glaciares?
Los glaciares cubren alrededor del 10 % de la superficie terrestre y almacenan aproximadamente el 70 % del agua dulce del planeta. Aunque están presentes en diversas latitudes, su papel es crítico para ecosistemas frágiles, comunidades indígenas, y ciudades que dependen de la escorrentía glaciar para el abastecimiento de agua.
Funciones clave de los glaciares:
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Regulación del ciclo hidrológico: Liberan agua gradualmente, manteniendo el caudal de ríos incluso en estaciones secas.
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Reflejo solar (albedo): Las superficies heladas reflejan la radiación solar, enfriando el planeta. Su pérdida acelera el calentamiento global.
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Sustento para la biodiversidad: Ecosistemas de alta montaña y especies endémicas dependen del entorno glaciar.
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Patrimonio geológico y cultural: Muchos glaciares son considerados sitios sagrados o históricos por comunidades locales.
Una crisis en marcha: datos alarmantes
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Según la Organización Meteorológica Mundial (OMM), el deshielo de glaciares representa actualmente una de las principales fuentes de aumento del nivel del mar.
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La red World Glacier Monitoring Service estima que en los últimos 40 años, los glaciares han perdido más de 9.000 gigatoneladas de hielo.
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Se calcula que en algunas regiones, como los Andes tropicales, los glaciares podrían desaparecer por completo en menos de 30 años.
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El informe del IPCC (Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático) advierte que el derretimiento masivo de hielo podría generar fenómenos extremos como inundaciones repentinas, escasez de agua estacional y pérdida de suelos fértiles.
El primer Día Mundial de los Glaciares
Uno de los eventos más importantes del año será la celebración inaugural del Día Mundial de los Glaciares, el 21 de marzo de 2025. Esta fecha fue elegida por su cercanía con el Día Mundial del Agua (22 de marzo), subrayando el vínculo entre glaciares y abastecimiento hídrico.
Ese día se espera la realización de eventos coordinados a nivel global:
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Jornadas educativas en escuelas y universidades
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Campañas de concienciación en redes sociales
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Exhibiciones fotográficas y artísticas sobre glaciares
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Seminarios científicos abiertos al público
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Proyecciones de documentales en centros culturales y cines
La gran conferencia internacional
Entre el 29 de mayo y el 1 de junio de 2025, se celebrará en Dushanbé (Tayikistán) la Conferencia Internacional sobre la Conservación de los Glaciares, organizada en colaboración con la UNESCO y la OMM.
Esta conferencia reunirá:
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Líderes políticos de más de 50 países
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Expertos en glaciología, hidrología y cambio climático
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Representantes de comunidades indígenas afectadas por el deshielo
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ONGs ambientales y jóvenes activistas
Se prevé el lanzamiento de una Declaración Global por los Glaciares, que establecerá un marco de acción para la próxima década.
Consecuencias del deshielo glaciar
La desaparición de glaciares no es solo una cuestión estética o paisajística. Afecta directamente a la vida humana y natural:
Impactos sociales:
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Escasez de agua potable para millones de personas
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Reducción de la producción agrícola
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Riesgo de conflictos por el control de recursos hídricos
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Migraciones forzadas por desastres naturales
Impactos ecológicos:
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Pérdida de hábitats de especies adaptadas al frío
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Desequilibrio en los ciclos de reproducción de fauna silvestre
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Desaparición de especies endémicas de montaña
Impactos económicos:
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Afectación del turismo de montaña y deportes invernales
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Pérdidas en producción hidroeléctrica
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Daños a infraestructuras por aludes o desbordamientos glaciales
¿Qué podemos hacer desde casa?
Aunque la lucha por los glaciares parece lejana desde la vida cotidiana, cada persona puede contribuir:
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Reducir la huella de carbono: Usar transporte público, consumir productos locales, evitar vuelos innecesarios.
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Ahorrar agua y energía: Tomar duchas cortas, apagar luces, aislar viviendas.
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Apoyar políticas climáticas: Votar por propuestas sostenibles, firmar peticiones, presionar a gobiernos.
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Educar y compartir: Informar a otros sobre la importancia de los glaciares y la crisis climática.
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Donar o colaborar con ONGs que trabajan en conservación glaciar o proyectos de adaptación.
Conclusión: un año para tomar decisiones
El Año Internacional de la Conservación de los Glaciares 2025 no es solo un evento simbólico. Es una invitación a actuar, a nivel local y global, con la urgencia que la crisis climática exige.
Proteger los glaciares es proteger las fuentes de agua del futuro, los ecosistemas de montaña, y la estabilidad climática del planeta. En un momento crítico para la humanidad, este año representa una oportunidad histórica para transformar la conciencia en acción.
